“Dios me había hecho pensar algo que debía hacer de mí un loco de Cristo, un grano de trigo arrojado a la tierra... para dar frutos"(P.Federico)
Sean fieles a ese amor de Dios y al de la Divina Niña, ¿cómo? practicando la humildad, sembrando esa semilla de la Esclavitud en sus corazones"(M. Rosario)
Todas nuestras acciones han de ser para Dios, por amor de Dios todos nuestros trabajos, y que hemos de estar en Dios, es decir endiosadas en Él teniendo presencia suya cons-tantemente" (M. Rosario).
“La Esclavitud es: Humildad que desea el desprecio por Cristo. Obediencia que no conoce la propia voluntad. Sencillez que no conoce sino la recta intención. Espíritu de sacrificio que da la vida por Dios y por las almas. Generosidad que a todo renuncia y a sí mismo se da. Amor agradecido que se ofrece, se inmola y se hace UNO con Jesús en la Misa de cada día. (P.Federico)